miércoles, 12 de septiembre de 2007

LO QUE SIGNIFICA PARA MI "DECEPCIÓN"

La definición de la palabra decepción podría ser el equivalente a decir que el ser humano es irremediablemente idiota.
Si no esperas nada no te decepcionarás jamás, así de simple ¿no?
Hay que limitarse a vivir el momento y disfrutar las cosas que llegan, que se tienen, disfrutarlas de verdad mientras estén allí porque seguro que luego las echaremos de menos si llega un día en que ya no están. La famosa frase de "no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos" o el "siempre deseamos lo que no tenemos"...

¿Cómo no vamos a ser unos putos degraciados si se nos pueden aplicar esas frases? Vaya mundo este...

Hay que disfrutar de la gente que vas conociendo, aunque que sólo estén ahí unos días, aunque no lleguen a ser tus amigos, aunque se queden en relaciones superficiales, no esperar que sean nada, que lleguen a nada... Seguro que si alguien resulta ser un gili hasta de eso aprenderás algo... JAJAJAJA

Hay quien se pasa la vida añorando las cosas que no llegan. Cuesta no hacerlo, pero hay que evitarlo y sobre todo "no hacerse pajas mentales", así de simple.

Confieso que muchas veces lo he hecho. Ahora no. Me niego.

"Sólo quiero vivir,
Coger mi corazón y ponerlo a sentir,
No quiero guardarlo en un cajón,
Ni que se enrancie apoltronado en un sillón.

Sólo quiero vivir,
Batir mis alas hasta muy lejos de aquí,
No quiero dar vueltas en derredor
Ni quedarme esperando un supuesto destino.

Sólo me queda vivir
Y no quiero que nunca
Se me olvide sentir
Lo que estoy sintiendo ahora.

Y es que tengo que sobrevivir
Ser más fuerte que la corriente
Que va arrastrando a la gente
(y que a veces me arrastra a mi)
Por un camino que no es el que quiero seguir".

No os dejéis arrastrar...

11 comentarios:

Anónimo dijo...

ya ves eh??? puta vida. si te soy sincera a mí me pasa lo mismo (vida personal y profesional) siempre quiero más y mejor claro, en vez de valorar lo que tengo y disfrutar del momento. Espero aprender algún día. Ánimo niña con la semana y espero verte el viernes en el concierto de Massive Attack. me cuentas. Y bueno, el jueves iré con Franco a cenar al Hobbes así que si te quieres apuntar...Prometo no liarte...jejeje

Raúl Masa dijo...

Y que consejos das, jejeje.

Porque dices que no hay que arrastrasea eso, pero... no dices como no hacerlo, jeje.

Interesante Blog, me dejaré tropezar por aquí de vez en cuando.

Saludines

SOLOYO dijo...

Raúl, el primer paso es ser consciente de que existe esa corriente y eso es en lo que os "intento ayudar" (si se me permite la soberbia).
Después depende de cada uno.

Bienvenido a mi blog.

Tenemos mucho en común.

Anónimo dijo...

Yo sí tengo cosas. Tengo montones de cosas.

Tengo sonrisas de gominola verde turquesa que huelen a canela y pica-pica. Y que cuando las tocas te embadurnan con brillantina.

De éstas os daría pero las quiero todas para mi. Aunque si queréis alquilo, cambio y presto sueños de viajes increibles y otras muchas cosas que son mejor compartirlas.

¿ Que tenéis vosotros? ¿ Qué buscais ? decidmelo, quizás tenga yo uno de esos ...Tengo montones de cosas, montones de cosas.

SOLOYO dijo...

Qué capacidad de hacerme sonreir!

raindrop dijo...

Estás consiguiendo que me enganche a tu blog... Ya casi escribo más aquí que en el mío (por lo menos, con más frecuencia). :)
Recuerdo que Audrey Hepburn dijo que no podía decepcionarle la vida, porque no se esperaba nada de ella.
Esta mujer ha sido (y sigue siendo, aunque en recuerdo) hermosísima: en sus años mozos, con sus películas, siendo de la resistencia antinazi en Holanda,... y ya más entrada en años, como embajadora especial de UNICEF. Recuerdo que la subasta de su vestido en 'Desayuno con diamantes' sirvió para montar un par de escuelas en Asia.
No esperaba nada de la vida, pero no se estaba quieta.
Supongo que sabía que la vida, más que la esperen, prefiere que le salgan al encuentro.
Un besazo, guapa, y hasta otra.

SOLOYO dijo...

Gracias Raindrop!
Me encanta que participes porque siempre tienes algo interesante o bonito que aportar.
Para mi es un reto escribir y una victoria cada vez que os gusta.
Mil gracias!

Avellaneda dijo...

Pues no había leido este post pero ahora si y efectivamente estamos en muchas cosas de acuerdo. Que casualidad no?
No sé a ti, a mi me surgió esa reflexión porque una amiga de toda la vida me soltó un "me has decepcionado" que me rompió por dentro y luego me indigno por falso...

En fin, te visitaré más a menudo. Mil gracias por tu visita y por tus comentarios. Esto de hilar un blog con otro tiene su aquel! Llego a tí por una fugaz visita al de raindrop en el que caí por el de montt al que llegué por el de fogonazos y... paro ya!! :D

SOLOYO dijo...

Hola de nuevo Avellaneda! Pues yo procuro no hacer referencias personales en mi blog, sólo hablar de lo que las experiencias me han enseñado o de las conclusiones que he sacado, pero mi motivo para escribir esto fue que por un momento esperé más de la cuenta pero muy rápidamente me di cuenta de que no debía haber esperado, así que dejé de esperar y por tanto desterré la sensación de decepción de mi mente.
Es verdad que es curioso cómo estamos todos conectados en la blogosfera... Me encanta: todo un mundo para descubrir.

Anónimo dijo...

Inquietante, el texto sobre tus virtudes respiratorias a la hora de pernoctar, comienza prometiendo, picante, atractivo, cuasi excitante y al final te descoloca del todo, lo peor es que omitieses lo unico... parece mentira que no sepas que lo que vende es el sexo y la violencia, asi que si quieres lanzar tu blog al estrellato, o matas a alguien y lo cuentas o nos cuentas tus noches de lujuria (preferimos esta opción)...
Un besote y nos vemos en la cena!!
Fran

Tamara dijo...

Estoy totalmente de acuerdo en todo lo que dices. Perdemos tanto tiempo esperando que pasen cosas, que nos olvidamos de actuar para que pasen. Plantearse grandes retos, ambiciones, enormes proyectos, etc, nos deja exhaustos y si no llegan pronto, con una cara de pasmo impresionante. Y nos amargamos, caemos en rollos victimistas, nos deprimimos sin darnos cuenta del tiempo tan precioso que estamos perdiendo, en lugar de, sencillamente, vivir. Sentir cada instante como único e insuperable, cada conversación, cada encuentro, cada risa o cada lágrima.
He descubierto tu blog por un comentario que dejaste en un post de una gran amiga: Avellaneda.
Un placer leerte. Un abrazo.